19 mayo, 2009

SEPULTAN A FLORIAN COMO A UN "HEROE" LLAMADO "EL LIDER" , LO RECUERDAN COMO BUENO POR AYUDAR A COMPRAR RECETAS Y PAGAR DEUDAS....

El pastor Ronny Florián, sobrino del occiso, durante su panegírico. Andrés Terrero


BARAHONA. Lo sepultaron como todo un "santo" que resucitará en la segunda venida de Cristo. En medio del panegírico, la multitud vociferaba :"¡Crimen!, ¡crimen!".

Así, a las 6:20 de la tarde de ayer la tierra caliza de una humilde fosa en el cementerio municipal Don Américo Melo, cayó sobre el féretro donde ahora mora el otrora capo más importante de la República Dominicana: Rolando Florián Feliz.

Madres, hermanos, hijos (tenía 15), concubinas, primos, vecinos y curiosos clamaban por justicia y pedían la muerte del capitán Lino Oscar Jiménez, quien mató al capo durante un incidente ocurrido la noche del pasado sábado en la cárcel de Najayo.
"Murió como un valiente. El gran pecado de él fue luchar por su dignidad", dijo el pastor Ronny Florián, sobrino del occiso. En su panegírico, consideró su muerte como "un hecho vil, cruel y probablemente planificado".

Aunque en todo momento rehusaron conversar con la prensa, los pocos familiares que hablaron, reiteraron que "son gente de paz, de perdón, y no una familia para guardar odio".
Florián, de 43 años de edad, había cumplido 15 años de los 20 a que había sido condenado. Lo trasladaron de varias prisiones y se dice que mantenía negocios desde la cárcel. Su actitud rebelde fue la que, según versiones de los oficiales de Najayo, propició su muerte, tras exigirle que terminara la visita que dos mujeres le hacían desde las 4 de la tarde.
Domínica Florián, prima del fallecido, reconoció que él pudo actuar mal al irrespetar las normas carcelarias, pero "no debieron matarlo por ello".

El paseo de Florián
Su velorio fue como el de un humilde cristiano. Un viejo minibús lo paseó por el centro de Barahona desde las 4:45 p.m. hasta pasadas las 5:30 p.m. La procesión fue el foco de la atención. Ésta quedó en la memoria de decenas de celulares y en la mente de niños, jóvenes y adultos, que dejaron sus trabajos y quehaceres para ver cómo llevaban a la tumba a Florián.

Su velorio se inició el domingo en la noche en la funeraria El Ángel. Desde la mañana de ayer hasta entrada la tarde, cientos de personas que llegaban desde Santo Domingo, Azua y otras ciudades, hacían filas para verlo inerte.

"Lo importante es el final"
En su juventud, Florián fue dirigente de jóvenes en la iglesia Adventista del 7mo. Día de Barahona. A las 4 de la tarde de ayer la funeraria se "transformó" en una "iglesia". El pastor Jeremías Medrano destacó que "lo más importante de una persona no es cómo comienza, sino cómo termina".
Su madre, Carmen Féliz, asegura que verá a su hijo en el cielo. "Ayer (el domingo) hicimos una cadena de oración y sentí paz", dijo.

"El casanova"
En el velatorio aparecieron hijos de Florián y varias "esposas", quienes no se separaban del féretro. Una de ellas, una joven de aparentemente no más de 25 años, lo lloró hasta el final. Entre la gente se comentaba: "15 años (preso) para nada". No se supo si Daneris Mejía y Yury Lora, quienes estuvieron en la cárcel a la hora de su muerte, estuvieron presentes.

Mujeres relatan vivencias en la celda de Florián Féliz
Una menor de edad que acompañaba a la mujer que estaba en la celda de Florián Féliz relató anoche a Alicia Ortega en el noticiero SIN, que estuvieron en el lugar desde las 2:00 pm. y que ambas sostuvieron relaciones sexuales con el presidiario.
Dijo que su amiga la invitó a la cárcel para supuestamente buscar un dinero, y que estaba dudosa cuando ella la invitó a sostener relaciones con Florián. Relató que cuando los carceleros le exigían que salieran de la celda, Florián proclamó: "Que se aguanten, coño".

En la confusión, afirmó, vio a Florián "con una cosa en las manos", y que escuchó tres disparos.
Ostensiblemente nerviosa, la adolescente aseguró que en la celda (que ella llamaba habitación) había aire acondicionado y un televisor grande.
Al finalizar la entrevista, se presentó al canal de televisión la otra mujer, que afirmó que cuando vio a Florián herido se puso a llorar, y cuando fue a buscar ayuda se dio cuenta que la puerta estaba cerrada por fuera y que 25 minutos después entraron un oficial y dos agentes más, que les pidieron que se fueran y les llamaron un taxi.

Corroboró la versión de la menor de que se escucharon sólo tres disparos.
Dijo que Florián era como un padre para ella, porque le ayudó a criar una hija.
Sobre las supuestas relaciones sexuales, se limitó a decir que ella salió al baño y no sabe lo que ocurrió con su compañera.
Aseguró no había sido contactada por la Policía, pero que estaría en disposición de dar su versión sobre los hechos, aunque insistió en que no vio nada y que se sorprendió cuando Florián entró a la celda herido. Relató que Florián hizo dos llamadas telefónicas, una de ellas a su esposa.
Dijo que siente mucho temor.
De MARIELA MEJÍA
Fuente: Diario Libre

No hay comentarios: