GONAIVES, HAITI---residents of this flooded city try to get things back together days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
Un pequeño haitiana rescata un coche de entre las ruinas y el fango en las cercanías de su hogar en Gonaives, Haití. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---A young man carries his soaked belongings away from his flooded just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---residents in this flooded city clean their clothes and dishes in the muddy water under an overturned bus just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---residents of this flooded town get take to the flooded streets just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---24 year-old Fleurie Benita carries her rescued belongings from her flooded home just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---A view from the air of this fooded city just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---A view from the air of this fooded city just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---7 year-old Sonson Pierre sits in knee deep mud outside his family's flooded home days after several storms including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---7 year-old Sonson Pierre sits in knee deep mud outside his family's flooded home days after several storms including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
GONAIVES, HAITI---residents of this flooded town get take to the flooded streets just days after several storms/hurricanes including Hannah recently hit the country. PATRICK FARRELL
Un pequeño haitiana rescata un coche de entre las ruinas y el fango en las cercanías de su hogar en Gonaives, Haití
Era su tercer día sin agua ni comida, y Fleurie Benita vadeó por el fango que le llegaba a la rodilla, balanceando todas sus posesiones en la cabeza, sin sabe qué hacer ahora, o qué vendrá.
Con cada paso que daba, la madre de cuatro hijos recordaba la espesa lluvia y el sonido de la muerte llamando a su puerta. Y después, su desesperada situación.
"Hui de allí con los niños. Corrimos a la casa de un vecino'', dice Benita, de 24 años, que como tantas otras personas de aquí dice que una decisión de último minuto de salir bajo la intensa lluvia de la perturbación ciclónica Hannah fue lo que les salvó la vida. "El agua no me dejó siquiera una cama donde dormir. Hasta los cacharros de cocina se llevó.
Residentes dejan sus casas y cargan sus pertenencias personales
JACQUELINE CHARLES / TMH
GONAIVES, Haití
JACQUELINE CHARLES / TMH
GONAIVES, Haití
PATRICK FARRELL
Un pequeño haitiana rescata un coche de entre las ruinas y el fango en las cercanías de su hogar en Gonaives, Haití
Era su tercer día sin agua ni comida, y Fleurie Benita vadeó por el fango que le llegaba a la rodilla, balanceando todas sus posesiones en la cabeza, sin sabe qué hacer ahora, o qué vendrá.
Con cada paso que daba, la madre de cuatro hijos recordaba la espesa lluvia y el sonido de la muerte llamando a su puerta. Y después, su desesperada situación.
"Hui de allí con los niños. Corrimos a la casa de un vecino'', dice Benita, de 24 años, que como tantas otras personas de aquí dice que una decisión de último minuto de salir bajo la intensa lluvia de la perturbación ciclónica Hannah fue lo que les salvó la vida. "El agua no me dejó siquiera una cama donde dormir. Hasta los cacharros de cocina se llevó.
Después de cuatro días de incesantes lluvias, el sol finalmente atravesó las nubes el jueves en esta ciudad baja. Y los residentes empezaron a calcular los daños.
Hannah ha sido la peor tormenta de la temporada ciclónica del 2008. Se llevó 136 vidas en Haití, 102 de ellas de la de Antibonite, donde está situado el pueblo de Gonaives, según dijo Abel Nazaire, de la oficina de protección civil de Haití.
Hannah ha sido la peor tormenta de la temporada ciclónica del 2008. Se llevó 136 vidas en Haití, 102 de ellas de la de Antibonite, donde está situado el pueblo de Gonaives, según dijo Abel Nazaire, de la oficina de protección civil de Haití.
En Gonaives, la lluvia más ligera puede dar lugar a inundaciones súbitas y deslizamientos, donde las montañas se han deforestado para hacer carbón. Tres ríos bajan por la montaña, y todos ellos apuntan hacia el pueblo.
La región ha quedado prácticamente aislada del resto del país desde que azotó la tormenta. Muchos de los habitantes se refugiaron en los techos, y otros vadeaban por ríos de fango que les llegaban a las rodillas y hasta la cintura, pasando cerca de casas completamente anegadas y de autobuses caídos de costado.
La región ha quedado prácticamente aislada del resto del país desde que azotó la tormenta. Muchos de los habitantes se refugiaron en los techos, y otros vadeaban por ríos de fango que les llegaban a las rodillas y hasta la cintura, pasando cerca de casas completamente anegadas y de autobuses caídos de costado.
Algunos trataron de salvar lo que les quedaba, y paleaban el fango con la esperanza de encontrar alguna olla, una camisa, tal vez un zapato. Los que encontraban algo lo enjuagaban con agua de un fangoso canal cercano en el que flotaban animales muertos.
Gracia Delva, una cantante haitiana de Konpa , visitó la ciudad el jueves y se sumó a los residentes en sus peticiones de ayuda. El senador Youri Latortue, que representa a la región, dijo que planea pedirle ayuda al gobierno.
Gracia Delva, una cantante haitiana de Konpa , visitó la ciudad el jueves y se sumó a los residentes en sus peticiones de ayuda. El senador Youri Latortue, que representa a la región, dijo que planea pedirle ayuda al gobierno.
"Es muy difícil'', dijo, según se aprestaba a subir a bordo de un helicóptero que lo llevaría a Port-au-Prince, la capital. "Puede haber huracanes, pero cuando no hay estructuras es muy difícil''.
Los alimentos y otros artículos de socorro no están llegando con suficiente rapidez, y eso convierte las peticiones de ayuda en indignación, cuando no hay respuesta a las solicitudes de agua potable y ayuda del gobierno. Los habitantes de aquí dicen que a pesar de las promesas de ayuda de las organizaciones internacionales, es muy poco lo que les ha llegado.
Los puentes, tanto los que van al sur como los que van al norte, se desplomaron, y las principales vías a la ciudad están bloqueadas por lagunas fangosas, de modo que es casi imposible llegar aquí por tierra.
Los alimentos y otros artículos de socorro no están llegando con suficiente rapidez, y eso convierte las peticiones de ayuda en indignación, cuando no hay respuesta a las solicitudes de agua potable y ayuda del gobierno. Los habitantes de aquí dicen que a pesar de las promesas de ayuda de las organizaciones internacionales, es muy poco lo que les ha llegado.
Los puentes, tanto los que van al sur como los que van al norte, se desplomaron, y las principales vías a la ciudad están bloqueadas por lagunas fangosas, de modo que es casi imposible llegar aquí por tierra.
La Misión de Estabilización de Naciones Unidas (ONU) logró enviar por aire a socorristas y otros el jueves para que estudiaran los daños, pero la inundación de toda la ciudad convertía eso en una tarea imponente. Del aire, Gonaives parece una ciudad sumergida en fango. Las casas están casi enteramente hundidas, y en algunos casos sólo se ven los oxidados techos de metal. Algunos residentes están atrapados en los techos, y otros ponen la ropa esparcida en los techos para que se seque.
El contingente de Argentina de las Naciones Unidas, con sede en la ciudad, proveyó 660 galones de agua y 2,000 raciones de comida, y evacuó alrededor de 400 personas. Pero, para aquellos que quedaron aislados y sin comida por tres días, la ayuda se demoró en llegar.
"No podemos vivir en esta situación'', dijo Baptiste Jean, de 28 años. "No tenemos un país. No tenemos un presidente. La ciudad esta destruida''.
"No es que simplemente perdimos nuestra casa. La casa fue eliminada'', añadió Phillipe Joseph, de 38. "Toda la familia --madre, padre, hermana, hijo-- está desamparada. Pero, gracias a Dios, están aquí''.
"No podemos vivir en esta situación'', dijo Baptiste Jean, de 28 años. "No tenemos un país. No tenemos un presidente. La ciudad esta destruida''.
"No es que simplemente perdimos nuestra casa. La casa fue eliminada'', añadió Phillipe Joseph, de 38. "Toda la familia --madre, padre, hermana, hijo-- está desamparada. Pero, gracias a Dios, están aquí''.
Pero, como tantos aquí, hizo un llamado al gobierno a que haga más.
"Tienen mucho trabajo que hacer porque, después de Jeanne, no se hizo nada. Sólo desperdicios del gobierno. Yo habría esperado que después de éste hubieran asumido su responsabilidad y se preocupen porque el dinero y la ayuda vayan a los pobres'', dijo.
"Tienen mucho trabajo que hacer porque, después de Jeanne, no se hizo nada. Sólo desperdicios del gobierno. Yo habría esperado que después de éste hubieran asumido su responsabilidad y se preocupen porque el dinero y la ayuda vayan a los pobres'', dijo.
La tormenta tropical Jeanne, que también desencadenó un torrente de agua sobre Gonaives, causó más de 3,000 muertes en Haití en el 2004.
En los días trascurridos desde Hanna, decenas de miles de personas han ido a parar a refugios --al menos 48,000 de Gonaives y lugares aledaños. Pero muchos más, por miedo a los saqueadores, siguen durmiendo en los techos, donde pueden vigilar lo que queda de sus hogares.
Otros simplemente caminan por las calles, suplicando que les brinden desde alimento hasta ropa, y duermen donde pueden. Y otros se han refugiado en las áridas montañàs, donde piensan esperar las próximas dos tormentas --Ike y Josephine.
En los días trascurridos desde Hanna, decenas de miles de personas han ido a parar a refugios --al menos 48,000 de Gonaives y lugares aledaños. Pero muchos más, por miedo a los saqueadores, siguen durmiendo en los techos, donde pueden vigilar lo que queda de sus hogares.
Otros simplemente caminan por las calles, suplicando que les brinden desde alimento hasta ropa, y duermen donde pueden. Y otros se han refugiado en las áridas montañàs, donde piensan esperar las próximas dos tormentas --Ike y Josephine.
"No tengo dónde dormir'', dijo Marie-Josette Moise, de 41 años, madre de siete, que se subió a un techo de seis pisos de alto en medio de la tormenta para buscar albergue.
Algunos estaban asustados.
"Ya estamos muertos'', dijo Mackento Jacques, de 13 años, al preguntársele sobre Ike, que podría afectar a Haití este fin de semana. "No podemos hacer nada''.
Cassandre Loisy, de 23 años, no ha visto a su hija de 3 años desde que se vio obligada a enviarla a quedarse con unos vecinos cuando Hanna comenzó a soplar. El jueves, la sala de su casa verde y blanca estaba hundida en lodo hasta la rodilla. Aguas albañales entraban por la puerta del frente.
"Nunca creímos que las lluvias vinieran de esa manera'', dijo ella. "Estábamos muy confundidos, sólo nos dio tiempo a agarrar nuestros pasaportes y huir''.
"Ya estamos muertos'', dijo Mackento Jacques, de 13 años, al preguntársele sobre Ike, que podría afectar a Haití este fin de semana. "No podemos hacer nada''.
Cassandre Loisy, de 23 años, no ha visto a su hija de 3 años desde que se vio obligada a enviarla a quedarse con unos vecinos cuando Hanna comenzó a soplar. El jueves, la sala de su casa verde y blanca estaba hundida en lodo hasta la rodilla. Aguas albañales entraban por la puerta del frente.
"Nunca creímos que las lluvias vinieran de esa manera'', dijo ella. "Estábamos muy confundidos, sólo nos dio tiempo a agarrar nuestros pasaportes y huir''.
Para escapar a la violenta crecida, Loisy y otros familiares, entre ellos su madre de 54 años, escalaron primero el balcón del frente y luego un muro de siete pies de alto que guarda su puerta principal.
Loisy, estudiante de enfermería, dijo que todo el dinero de su matrícula desapareció en la tormenta. Hace cuatro años, durante la tormenta tropical Jeanne, la familia sufrió una pérdida aún más grave: la muerte de su sobrino Rickaard Pierre, de 5 años.
La madre de Rickaard, Raymond Mulatre, dijo que Hanna será recordada por al-1/5un tiempo.
Loisy, estudiante de enfermería, dijo que todo el dinero de su matrícula desapareció en la tormenta. Hace cuatro años, durante la tormenta tropical Jeanne, la familia sufrió una pérdida aún más grave: la muerte de su sobrino Rickaard Pierre, de 5 años.
La madre de Rickaard, Raymond Mulatre, dijo que Hanna será recordada por al-1/5un tiempo.
13 comentarios:
Increible tu blog . Gracias.
TRISTEZA Y DOLOR ES LO ÚNICO QUE ESAS PERSONAS VIVEN,COMO SER HUMANO QUISIERA QUE UN MILAGRO LOS ILUMINE Y YA , DEJEN DE SUFRIR.ES INCREIBLE ESTE BLOG, ME MOSTRO MUCHAS COSAS QUE NO CONOCIA, GRACIAS .UN CARIÑO DESDE URUGUAY.
que Dios bendiga al pueblo haitiano en estos momentos tan difisiles y que les de fuerza y sabiduria para selir adelante de ese dolor tan grande y que les de mucha fe en Dios.
Realmente es algo doloroso y trágico lo que les esta pasando a nuestros hermanos de haiti,un abrazo fraterno desde aca de la ciudad de iquitos Peru,y siempre nosotros estaremos orando para que estas cosas cesen,que Dios les ilumine y proteja muxoo,que la sabiduria y el amor renazca en sus corazones.Bendiciones del Padre Todopoderoso**
Esperando que existan mas blogs que informen sobre estos desastres para que existan personas que colaboren en la oracion y ayuda espiritual asi como en las cosas materiales para poder restablecer la paz y calma en dicha zona
un abrazo de Iquitos-Perú
hola amigos esto que esta pasando en haiti esta pronosticado en la tersera profesia de fatima, la iglesia diio permiso de revelar alos fieles una parte del mensaje,fatima, se la apericio a tres niñas y le dijo lo que le espera al mundo tres dias sin luz un terremoto que durara ocho horas sini me cren lean estos
san lucas capitulo 21 versos 5, 11, 12, 19, 20 ,33
carta de san pablo capitulo 3, 8, 14
el profeta isaias 10, 15
señores hya que buscar al señor
Es una lastima lo que pasa en Haiti, yo se lo que se siente ser uno de los paises mas pobres de latinoamerica y ocurran estos tipos de desastres, porque yo soy hondureno y en el 98 nos destrozo la capital el huracan Mitch… por eso me solidarizo con el pueblo de Haiti con cualquier tipo de ayuda ya sea monetaria o con alimentos u objetos QUE REALMENTE NECESITAN (digo esto porque en Honduras nos mandaron muchas cosas que no necesitabamos, hasta en gastronomia debemos de pensar, porque nos es lo mismo lo que come un mexicano que un hondureno pobre o como viste un Aleman con un haitiano), aunque se que la mayoria de tales ayudas seran robadas y desaparecidas como ocurrio en Honduras, pero eso no importa lo que importa es que ayudemos. Ojala y el gobierno de Honduras aunque seamos pobres ayuden tecnicamente con personal profesional, por lo menos nos hemos vuelto expertos en desastres y estamos bien organizados en estos casos (ahora)… LOS ANIMO A AYUDAR SE LO AGRADECERAN ASI COMO EL PUEBLO DE HONDURAS ESTA AGRADECIDOS POR LA AYUDA EN EL 98
la tristeza me invade alver todo este sufrimiento de nuestros hermanos de haiti mi cabeza ni mi corazon alcanzan explicarse porque suceden estos desastres un abrazo para todos ellos espero en dios les de fortaleza pararecuperarse de lo sucedido mil bendiciones para todos ellos que dios los cuide estoy de acuerdo con mi companero hay que acercarnos mas adios.
sólo espero que este trágico desastre haga reflexionar a todo el mundo en especial a los mandatarios de que dejen el egoísmo de pensar solo en el dinero y en ellos mismos y se conciencie en que no todo es dinero hay cosas en la que debemos darle prioridad como lo es NUESTRO PLANETA TIERRA, y esos países que son de bajos recursos tanto económicos como de afecto solo espero que este escrito los haga reflexionar y no es para juzgar ni señalar sino para ponernos a pensar en que en lo mas importante para cada uno de nosotros. "TODO LO QUE DIOS ES Y TODO LO QUE ÉL TIENE PUEDE SER RECIBIDO POR MEDIO DE LA ORACIÓN".
Por la mañana vi un reportaje del programa de Ecuavisa Internacional "LA TELEVISIÓN". Vi la labor que desempeñan los cascos azules desde el terremoto que devastó a Haití; sobretodo los militares ecuatorianos, fue muy conmovedor como hacían lo posible para sacar a las personas de los escombros.
hubo un momento en que presentó otro temblor, el miedo invadió a los militares ecuatorianos e intentaron salir del lugar, a pesar de que habían mas personas ahí pero cuando escucharon unas voz de desesperación de dolor diciendo "ecuatoriano no me dejes, por favor" al escuchar esto no dudaron en quedarse y sacarlo de los escombros. Era un extranjero que seguro jamas olvidara que esas seis palabras salvaron su vida.
Esta y otras historias quedaran en el largo libro de recuerdos o peor aun en el de siempre en el libro de los héroes anónimos...
soy alexandra alban, ecuatoriana. Cuando vi y escuche en la televison a un casco azul en Haiti diciendo "gracias a DIOS y a Ecuador hemos salvado a muchas personas, ya no se si hoy hombre o mujer lo unico que se es que estoy aqui porque el de arriba quiere que salve mas vidas... POR TI ECUADOR" en ese momento mi corazon latio a mil por horas, le dije a mi madre con lagrimas en mis ojos, ellos son de mi pais, Ecuador...
GRACIAS DIOS
GRACIAS ONU
GRACIAS ECUATORIANOS CASCOS AZULES
Solo Dios sabe todo lo que va a pasar, el resto solo tenemos que elevar sus plegarias, pedirle por todos los hermanos de Haitì porque hoy atraviesan momentos dificiles e inolvidables, una de las cosas que todos tendriamos que hacer, es poner en practica ese conocimiento de la oración para enviar nuestras energías positivas a todas las personas que estan allí y como dicen mis alumnos Haitianos de la UID en VENEZUELA ellos necesitan un apoyo moral,sentimental y espiritual para que puedan abanzar en esta gran prueba que les dio nuestro señor. Que Dios los bendiga a todos y los ayude a recuperarse rápido de esta tragedia amén.
me da tristesa por lo que estan pasando los haitianos que dios ilumine a estas personas y que les de fuersas para salir adelante
me gustaria que todo el mundo los apoyaran y los sacaran de hay que les dieran comida ropa y trabajo
HOLA, ESTUVE PERSONALMENTE ALLI EN PLENO DESASTRE FUI INTEGRANTE DE LOS CASCOS AZULES PERUANOS Q APOYARON GONAIVES EN HAITI RECUERDO CUANDO REPARTIAMOS ALIMENTOS DE LAS DONACIONES DE PAISES HERMANOS ERA UN CAOS, LA GENTE HACIA LARGUISIMAS COLAS PARA CONSEGUIR ALGO DE ARROZ ACEITE Y FRIJOLESM ESTUVE 40 DIAS EN EL PUERTODE GONAIVES VIVIAMOS COMO RATAS DE MUELLE COMO NOS DECIAN LOS ARGENTINOS, LOS PERUANOS ESTAMOS HECHOS AL DOLOR...AVE_FENIX519@HOTMAIL.COM
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