A nuestro entender son muchos los libros sobre la famosa Era, entre ellos citamos "TRUJILLO"."La Tràgica aventura del poder personal de Robert D. Crassweller, y la "LA ERA DE TRUJILLO, de Jesùs de Galindez, el que nos referiremos a continuaciòn.
Los que nacieron durante la Era , en el albor de sus juventudes y dentro de las estrechas posibilidades de entonces, escogieron diversos caminos; una constante mental de una forma u otra primaba en todos: La Repùblica Dominicana era Trujillo y Trujillo era la Repùblica Dominicana.
Aparentemente de modo extraño, pero perfectamente explicable para los sociòlogos y los conocedores de la dialèctica de los grupos sociales y de la historia, rayando los años 1959-60 a raìz de la invasiòn por Maimòn, Constanza y Estero Hondo, un romàntico y firme sentimiento anti-Trujillista se diseminò por la pequeña burquesìa jovèn y pènsante de entonces. La furia sorda y subterrànea contra el trujillismo se expandiò vertiginosamente.
La joven intelectualidad de los centros urbanos, furiosamente anti-trujillista, se lanzò àvida de conocimientos a leer y pràcticamente devora obras de temàtica històrica, socio-polìtica y econòmica que va desde Marx, Comte, Maynard, Keynes, Marcuse, sin olvidar los criollos Prof. Juan Bosh, Pedro Mir, Juan Isidro Jimènez Grullòn. Los libros andaban de mano en mano, se hablaba y se criticaba sin temores ni tapujos, era la nueva etapa, lo vedado en 31 años.
Entre las obras històricas mayormente codiciadas para su lectura el conocidìsimo libro de Jesùs de Galindez. "LA ERA DE TRUJILLO", la cual habìa sido presentada en la Universidad de Columbia de New York, a fin de optar por la Càtedra por oposiciòn de Derecho Internacional.
Es esta una obra de testimonio y denuncia, fruto de una vivencia critica que hiriò y sorprendiò a aquel joven vascuence recièn salido del fragor de la contienda civil de su paìs donde militaba en el bando Republicano.
Galìndez nos dice textualmente...."Voy a estudiar, en consecuencia, el règimen polìtico de la Repùblica Dominicana durante los 25 años de la Era de Trujillo (1930-55). Pero no tanto como anàlisis de un paìs sino como prototipo de una especie continental. Los detalles podràn variar, pero los rasgos tìpicos se repiten de paìs en paìs"...
Este libro de Galindez segùn versiones de actores de primer òrden de este panorama tètrico, se convirtiò durante los meses siguientes despuès del 30 de mayo de 1961 en el tema obligado en las tertulias y circulos de estudios, nacìa ese interès por razones objetivas, no era sòlo mero prurito antitrujillista. Es esta una obra seria, imparcial y està extraordinariamente documentada.
Todo aquel que quiera empaparse de lo que aconteciò aquì, en esta media isla, desde 1930 hasta el 1933, debe leer esta obra. Al terminar Galindez de escribirla y publicarla quedaba fatidìcamente marcado por el hado trujillista que poco tiempo despuès habrìa de cobrarle con su propia vida en New York su osadìa.
Galindez muriò. Fuè màrtir y paladin de la causa por la que màs hombres y mujeres han muerto en la historia de la humanidad, la Libertad.
Emigrante vasco, llegò a la Repùblica Dominicana el 19 de noviembre de 1939, permaneciendo entre los dominicanos alrededor de 5 años y dos meses, hasta el 31 de enero de 1946.
Cuando Galìndez saliò del paìs dejò una estrechez social y fìsica en la capital de la repùblica, un difuso y latente terror de sus exiguos habitantes, la pasmosa miseria y resignaciòn de sus campesinos, que èl mismo se sorprenderìa, ya que cuando llegò en 1939 por primera vez, ni remotamente pensaba en encotrarse con una situaciòn socio-polìtica tan "sui generis", en los anales historiògrafos de esta Amèrica hispanoparlante.
Con todo este panorama, Galindez no se marchò de inmediato, amò a esta tierra, a sus gentes. Denunciò como un autèntico ciudadano del mundo atropellos e injusticias que bien pudiera dicerse no le concernìan por razones de origen y si le importaban por sentimientos de solidaridad humana.
Sintiò Galindez el alma del pueblo cuando escribe..."El pueblo Dominicano que yo he conocido es triste, hasta en sus fiestas. Carece de espontaneidad; y es porque desde la niñez se ha acostumbrado a frenar todas sus expansiones..."el hombre que asì se expresa con ese dejo de tristeza por el panorama que le toca contemplar es un hombre que ciertamente ama lo que ve y poque lo ama lo siente"..
Jesùs de Galìndez termina esta obra haciendo un recuento acerca de lo positivo que tuvo la Era, que dicho sea de paso, indiscutiblemente logrò. El capìtulo marcado con el titulo de "Era de Trujillo en la Historia Nacional", encierra el historial de una fase de nuestro proceso històrico bien exuberante de aleccionadoras experiencias y hasta cierto punto necesario como lecciòn. Nos dice Galindez..."Voy a prescindir en lo posible de vaguedades literarias, en elogios grandilocuentes o en crìtica acerba, para presentar tambien en lo posible hechos, resultados concretos, que basen una crìtica tanto positiva como negativa..."
Las nuevas generaciones debemos tener conocimiento de hechos como estos que sacudieron la conciencia de los pueblos libres del continente, y que hoy dia gracìas al libro nos es permitido conocerlos en toda su magnitud, pues solamente leyendo es que podemos tener un conocimiento cabal de los hombres que no tuvieron otro camino de perfecta paz por donde pudieran marchar, que no fuera el de seguir el consejo de su corazòn, ya que..."el heroismo siente y nunca razona y por eso tiene siempre razòn"...
Robert D. Crassweller, en su libro "TRUJILLO", La tràgica aventura del poder personal, que estuvimos leyendo en estos dìas nos dice sobre Galindez en su Capìtulo XXI (resumido) lo siguiente:
"...La Feria fue un capricho costoso, a los pocos meses, sin embargo, antes de los catastròficos efectos de la Feria otro hecho, un crimen, que habrìa de perjudicar a Trujillo mucho màs profundamente, tanto de forma inmediata como por el resto de su vida. En verdad, este crimen se convertiria en clàsico, la propia quintaesencia del crimen de capa y espada y mantendrìa en suspenso el ànimo del mundo entero. Se trata por supuesto, del caso Galìndez. No era esta la primera vez que el brazo de Trujillo habìase extendido por encima de los mares. Pero estos hechos no poseyeron ninguno de los refinamientos de intriga y del misterio que hicieron cèlebre el caso Galìndez.
Este se habia fascinado por el caràcter y la carrera de Trujillo, y habia recogido mucha informaciòn sobre tan peligroso tema. Asì es como decidiò escribir su tesis doctoral sobre la Era de Trujillo".
Dados su hàbitos bohemios, su desapariciòn el 12 de marzo pasò varios dias desapercibida.
En New York, Galindez habia estado sometido a vigilancia dominicana durante un tiempo, debido a su oposicion al règimen y a los escritos contra Trujillo que habia publicado. Agentes dominicanos trataron entonces de comprar a Galìndez el manuscrito por 25,000 dòlares. El autor, segùn parece, rehusò cateogoricamente. Trujillo llegò a la conclusiòn de que si Galìndez no podia ser sobornado, habria que matarle. Infinito debe de haber sido el cuidado con que se planeò cada detalle.."
En la contraportada del libro "La Era de Trujillo" de Jesùs de Galindez en un breve perfil leemos:
"...Galindez fue traido drogado al pais, fue presentado semi -inconsciente a Trujillo, quien intentò hacerle tragar varias hojas del libro màs penetratante contra su règime abyecto. Al escupir una hoja, Trujillo lo interpretò como un insulto a su persona y decretò su muerte luego de torturas atroces. Fue tirado a los "lobos" unos tiburones que el dèspota tenìa acorralados en un estanque en el estuario del rio Nigua, que alimentaba exclusivamente de sus enemigos.
El Dr. Jesùs de Galindez permanecerà siempre latente y viviente en el corazòn agradecido de todo buen dominicano amante de la libertad y los estadios superados de vida civilizada"...
crimenes trujillo