Los dominicanos pueden decir: el año que viene hay elecciones. Un decir como un juguete nuevo.
La expresiòn encierra un toque de magia que al criollo le encanta retozar con ella. Se parece aquel decir campesino, ¡Esta noche fiesta y mañana gallo! Porque son tantas las espectativas que genera el proceso pre y post electoral con sus resultados de por medio, que convierten un acto per se polìtico, en algo fuera de serie donde cabe de todo un poco.
Està bien, y està mal.
La expresiòn encierra un toque de magia que al criollo le encanta retozar con ella. Se parece aquel decir campesino, ¡Esta noche fiesta y mañana gallo! Porque son tantas las espectativas que genera el proceso pre y post electoral con sus resultados de por medio, que convierten un acto per se polìtico, en algo fuera de serie donde cabe de todo un poco.
Està bien, y està mal.
Està bien porque muestra, a la dominicana, una comunidad en movimiento. Inquieta como un adolescente. En permanente inconformidad, alerta para no dejarse meter gato por liebre. A la permanente espectativa. Apasionada, impaciente.
Obsèrvese como ya està en piè de polèmica la propuesta del PLD. Que si la unidad es patriòtica, que si es polìtica, alrededor de la candidatura de Leonel, como en realidad serà....Las interrogantes se suceden como las conformidades e inconformidades. Asì es que tiene que ser. Es lo normal.
Esa actitud se explica por muchas razones. Entre esas razones prevalece el hecho històrico que, despuès de la muerte de Trujillo la Repùblica Dominicana fue gobernada durante 22 años por Joaquìn Balaguer.
Esa eventualidad, que no voy a juzgar ahora, mantiene un estado de incertidumbre flotante sobre la Repùblica. Cada vez que suena el campanazo a elecciones la alarma se extiende. Las interrogantes se abren todas a la vez...y, a medida que pasan los perìodos presidenciales con màs razòn.
Està mal, por la floraciòn de tanto hongo y paràsito. De tanto decir y prometer cosas que nunca se llevaran a cabo. De tanto repetir las mismas bonituras vacìas.
Todo se convierte en un grotesco festival de flores de papel, de bocinas estridentes, caravanas inacabables donde siempre van las mismas personas que sòlo cambian el color de la camiseta y cachuchas.
Aùn este aspecto negativo tiene su necesaria explicaciòn. El año que viene hay elecciones huele a "bueno y a quemao"
Todo se convierte en un grotesco festival de flores de papel, de bocinas estridentes, caravanas inacabables donde siempre van las mismas personas que sòlo cambian el color de la camiseta y cachuchas.
Aùn este aspecto negativo tiene su necesaria explicaciòn. El año que viene hay elecciones huele a "bueno y a quemao"
Entendemos que en los paìses como el nuestro, y ya se entiende lo que quiero decir cuando decimos: como el nuestro, no se puede ni soñar que sean unos comicios como se estilan en cualquier paìs avanzado.
En un paìs avanzado todo està organizado. Todo està previsto. Todo està donde debe estar. Como la gente no vive del gobierno, y los polìticos reconocidos no tienen ìnfulas ni de mesias, ni de caudillos, ni de salvalo o perdònalo todo acaece como parte de la vida de la naciòn, no como el juicio final.
En un paìs avanzado todo està organizado. Todo està previsto. Todo està donde debe estar. Como la gente no vive del gobierno, y los polìticos reconocidos no tienen ìnfulas ni de mesias, ni de caudillos, ni de salvalo o perdònalo todo acaece como parte de la vida de la naciòn, no como el juicio final.
Hay debates pùblicos, y salen al medio trapitos de todos colores el dìa prefijado, que es un dìa laborable y normal como otro cualquiera la gente và y vota, y, no bien pasan unas doce o quince horas de cerradas las urnas infalible el conteo, sin interrupciones, sin sospechas, perfilan al que ganò antes de las 24 horas, lo es sin dudas.
Aquì es un lio. Un lio que tenemos que ir venciendo poco a poco. Se acueartelan las FF.AA. como si fuera una guerra. Los colegios electorales son "cuidados" por militares y policias. Se pierden urnas. No se ponen las actas correspondientes. Prevalece una actitud de sospecha entre los delegados polìticos, en definitiva puras ascuas.
Al comienzo del conteo es que empieza Cristo a padecer. Acusaciones y contra-acusaciones. Incertidumbre. Misterioso acertijo. Despuès del tiempo prudente es que vienen a decir quien fuè el que ganò.
Asì no se podemos seguir.
El Estado, en la Repùblica Dominicana es la empresa de mayor envergadura.
Al ser la macro-empresa, es el Estado el mayor empleador, el mayor dador, el mayor cooperador...el mayor todo.
El administrador de esa empresa Super, es el Jefe del Estado, entonces la gente vè en la elecciòn del Jefe del Estado la elecciòn de su patròn.
Ese concepto de Estado-gobierno y a la vez patròn empresarial tiene que influir negativamente en las elecciones, en su confiabilidad y en el equilibrio y sensatez de todos en su desarrollo.
El desarrollo de unas elecciones diàfanas exige madurez del pueblo que las celebre.
Nos falta todavìa madurar mucho y no se logra de un dìa a otro. Todavìa nos quedan muchas elecciones traumàtizantes con todo y su fanfarria, vaya quien vaya.....
Al comienzo del conteo es que empieza Cristo a padecer. Acusaciones y contra-acusaciones. Incertidumbre. Misterioso acertijo. Despuès del tiempo prudente es que vienen a decir quien fuè el que ganò.
Asì no se podemos seguir.
El Estado, en la Repùblica Dominicana es la empresa de mayor envergadura.
Al ser la macro-empresa, es el Estado el mayor empleador, el mayor dador, el mayor cooperador...el mayor todo.
El administrador de esa empresa Super, es el Jefe del Estado, entonces la gente vè en la elecciòn del Jefe del Estado la elecciòn de su patròn.
Ese concepto de Estado-gobierno y a la vez patròn empresarial tiene que influir negativamente en las elecciones, en su confiabilidad y en el equilibrio y sensatez de todos en su desarrollo.
El desarrollo de unas elecciones diàfanas exige madurez del pueblo que las celebre.
Nos falta todavìa madurar mucho y no se logra de un dìa a otro. Todavìa nos quedan muchas elecciones traumàtizantes con todo y su fanfarria, vaya quien vaya.....
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