Màrmara increible!!!, anoche soñè que las EDES no ibana devolver todo el dinero pagado de màs"
Soñar, esto es lo que hacemos, muchos lo hacen despiertos, hacièndose ilusiones quizàs de cosas irrealizables, otros durmiendo, cuando el subconciente ronda en lo màs infinito de sus cerebros, pero no importa, ya sea desiertos o durmiendo el contenido de la palabra soñar permanece inalterable, la aceptaciòn que le dà el diccionario es la misma...."nos representamos en la fantasia algùn objeto durante el sueño, en sentido figurado es un discurrir fantàsticamente y figurarse lo que no es cierto"...Y aparte esto es precisamente lo que ha pasado y lo que està pasando con muchos de nosotros, soñamos y soñamos sirvièndonos para paliar un poco nuestro ya lejendario rosario de calamidades que conforman dìa a dìa el modus vivendi que hemos sabido sobrellevar, ya como algo tan natural que acompañarà nuestra existencia, hasta sabe Dios cuando, por eso nos conformamos con soñar, ya que segùn el dicho popular, "soñar no cuesta nada"....
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...Y por eso como Don Chichì soñaba, veìa el pais iluminado de cabo a rabo, ni el màs mìnino apagòn, las exaperantes plantas de emergencia e inversores, arrumbados y llenos de òxido...
Soñaba que veìa rios de agua correr presurosas por las tuberìas del acueducto y subir orondas hasta el ùltimo piso del edificio màs alto de nuestra ciudad, era esta un agua limpia, sana, cuyos chorros formaban momentàneos espumarajes, las cisternas, los tinacos sobre los techos, y los galones y botellones estaban errumbados y llenos de telas de araña, pues ya no habìa necesidad de usarlos màs!...
Soñaba que veìa el peso dominicano, nuestro peso respetado dentro y fuera del pais. No podrìa decir que lo vi corriendo a la par con el dollar, pero estaba en un envidiable dos por uno, cosa que fortaleciò nuestra economìa y abaratò para todos el costo de la vida.
Soñaba que veìa a la gente mas respetuosa, los hijos con sus padres y viceversa, los alumnos con sus maestros, los empresarios con sus obreros...y en todos, consideraciòn y cariño.
Soñaba que veìa florecer la tolerancia con las ideas, las posturas y los comportamientos ajenos, se aceptaba como bueno y vàlido lo de los demàs aunque no se compartiese..
Soñaba que veìa las leyes, las resoluciones, las disposiciones oficiales a la par que justas y oportunas, eran acatadas con un celo y un respeto verdaderamente admirables por toda la ciudadanìa.
Vi hasta que la alternabilidad del, o en el poder era un hàbito inveterado en la comunidad polìtica nacional.
No vì un sòlo niño sucio y abandonado, durmiendo en cuevas y en parques, aprendiendo cuanto cosa mal hecha pueda aprenderse. No vi niños sin sus padres y sus madres se ocupaban de ellos porque podìan hacerlo.
Dejè de ver como por arte de magia, ancianos desvalidos, ancianos como àrboles caìdos, llenos de enfermedades, estrecheces, hambre, comprensiòn. Los veìa limpios, olorosos a lavanda descabezando sus sueños en còmodas y mullidas mecedoras de las residencias geriàtricas.
Vi, llena de asombro, la vuelta al paìs de miles de millones de dòlares situados, tiempo atràs en bancos de fuera, volvian estos al regazo productivo de la tierra madre que los generò, volvìa a invertirse para crecer màs, para ser màs.
Vimos como la deuda del paìs habia sido reducida a su mìnima expresiòn, el paìs en mi sueño gozaba de un gran prestigio como cumplidor de sus obligaciones.
Nos quedamos de una sola pieza cuando vimos la atenciòn esmerada que nuestros enfermos recibian en los hospitales pùblicos. En esos establecimientos de salud, en verdad se generaba salud y el bienestar del enfermo, ahora sobreabundaba de todo. Medicinas, jeringuillas, sueños, la limpieza brillaba en los rincones, la alimentaciòn nutritiva, los quiròfanos perfectamente abastecidos.
Cuando vimos las calles, no pudimos creer lo que atisbaban nuestros ojos. Ni un monton de basura, ni un sòlo ratòn, ni perro muerto, los filtrantes relucìan de limpios y eficiencia cuando llovìa....de repente despertè, la luz de un rayo cortò con su fogonazo intenso la oscuridad total de nuestra habitaciòn y en ese justo momento caìan torrenciales aguaceros, caì de golpe a la realidad, llovìa a càntaros, era el travieso "Dean", me dije, que hacia un recorrido juguetòn por nuestras costas caribeñas...cerramos los ojos, querìamos seguir soñando y olvidarnos por momentos de ese inoportuno raudo y peligroso turista...pero que và, la realidad nos golpeò con toda su crudeza, nos sobrepusimos.... y llegaron a nuestra mente aquellos famosos versos de Calderòn de la Barca:...."...Es verdad, pues reprimamos/ esta fiera condiciòn/, esta furia, esta ambiciòn,/ por si alguna vez soñamos/: y asì haremos, puès estamos/ en mundo tan singular,/ que el vivir sòlo es soñar:/ y la experiencia me enseña/ que el hombre que vive sueña lo que es, hasta despertar/...
VIÑETA: HAROLD PRIEGO. FUENTE: LISTIN DIARIO
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