Los Ángeles, 31 de julio.
El médico privado de Michael Jackson, Conrad Murray, no sólo está acusado por homicidio, sino también por varios otros delitos, informó hoy el diario Los Angeles Times. Con base en fuentes policiales, el periódico señala que el médico también está bajo sospecha de haber conseguido drogas a un “adicto” y haber recetado medicamentos de manera ilegal. Lo anterior se desprende de las órdenes de registro que se presentaron el jueves ante un tribunal en Nevada.
En tanto, en la disputa por la custodia de los tres hijos del fallecido cantante, se llegó a un arreglo transitorio: la madre de Jackson, Katherine, y su ex esposa Debbie Rowe, madre de los dos mayores, acordaron que los niños serán criados por la abuela, de 79 años, según comunicaron sus abogados. La decisión aún debe ser confirmada por un tribunal. Jackson murió el 25 de junio a los 50 años por un paro respiratorio. Murray está bajo sospecha de haber suministrado al cantante el narcótico propofol, pocas horas antes de su muerte.
No hay comentarios:
Publicar un comentario