Actualizado Miércoles, 12-08-09 a las 10:40
Los forenses de Los Ángeles han completado la autopsia oficial practicada a Michael Jackson. Pero sus resultados —incluido un completo análisis de toxicología— se mantendrán en secreto a petición de los investigadores policiales destinados a explicar la repentina muerte del rey del Pop justo en vísperas de su anticipado retorno a los escenarios.
Por el momento, ninguna autoridad se atreve a vaticinar cuándo se darán a conocer esos resultados. Aunque está claro que la investigación encomendada al Departamento de Policía de Los Ángeles, con ayuda de agentes federales anti-droga, sigue adelante bajo la hipótesis de un homicidio negligente que podría terminar en algún tipo de sumario penal. Ayer mismo se ejecutó una orden de registro en una farmacia de Las Vegas.
Los agentes de la autoridad se incautaron de al menos cuatro cajas de documentos, en papel y archivos informáticos, del establecimiento conocido como Applied Pharmacy Services. Este registro junto a otros similares apuntan hacia el médico personal del cantante, el doctor Conrad Murray. Las autoridades creen que el cardiólogo de origen caribeño administró a su estelar paciente el poderoso anestésico Propofol, justo antes de su fallecimiento.
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